Todo empezó ya hace 3 años, y 9 meses dentro de cuatro días, sí el día 8 de enero del 2010 a eso de las 4 de la tarde. Aun lo recuerdo estaba en una sala entre biombos con mi hijo en brazos y mi marido en una silla junto a mi cama. Josué estaba enganchado, yo no sabia lo que sé ahora del tema, cuando vino la matrona que había asistido mi parto, de la que no se el nombre pero siempre estaré agradecida de como me trató, a revisar como iba y me pregunto y la teta??? nunca me olvidaré de esa pregunta e ignorante de mi dije ojala pueda darle, a lo que respondió pues claro mira, apretó el pezón y salio un liquidillo, esto es lo que tiene que tomar tu hijo así que puedes.
Lo pongo en negrita porque es lo que realmente yo pensaba en ese momento. En mi familia solo mi cuñada había dado 6 meses a mi ahijado, por lo demás nunca había visto dar teta a nadie, mi madre no nos dió ni a mi hermano ni a mi.
El comienzo fue así así, se pasaba las horas muertas tomando teta, se dormía, los primeros días en casa fueron regulares, el niño solo quería brazos y yo no podía dejarlo tampoco, pero a la semana empezó a llorar por las tardes noches, tenia gases, no hacia caca, tenia hambre, que horror no se que le pasa y las visitas vienen y se van y no puedo casi ni verlas, menos mal que no vienen muchas, esta muy nervioso, que le pasa??? que no se hacer bien?. A la semana fuí a la revisión con el pediatra. Y horror!!!!, el niño no ha cogido peso y con lo que le cuento que le pasa, me dice que las tomas no son efectivas que le de 15 minutos de cada pecho cada 3 horas, pero yo había escuchado que era a demanda ??? y que en tres días volviera para volver a pesarlo. Tres largos días, no llega a las tres horas y pasa hambre. A los tres días vuelvo a ir, es cierto Josué apenas a ganado peso por lo que se levanta y saca un bote de leche de formula e indica que tras cada toma, después de los 15 minutos de cada pecho le de 30 mml de leche de bote, y que vaya aumentando según fuera viendo. Pues así salimos de la consulta y así empece hacer. Cada vez que veía un biberón por casa me venia abajo, lloraba, yo quería darle pecho a mi hijo y no le valía y tenia que ayudarlo. La familia me decía que no pasa nada que ya vería que hermoso se iba a poner en dos días, me paso como a mi madre no podíamos dar teta no valía, no alimentaba. No soportaba hacer los biberones lloraba cada vez que los veía, mi marido no entendía que tenia de malo, intentaba consolarme pero no lo conseguía. Buscamos biberones que se asemejaran al pezón. pero Josué era un tragón, los 30 mml se quedaban atrás pedía más y más, ya se tomaba 90 mml en nada de tiempo y yo cada día notaba menos las subidas de leche.
Durante el embarazo había visto por internet que existía una asociación de apoyo a la lactancia, incluso fuí un día pero no seguí asistiendo.
Mi marido lo veía normal y solo me decía, no pasaba nada que para eso esta la leche de formula. Ya tenia más de un mes y 120 mml de leche después de mis 15 minutos en cada pecho cada 3 horas tanto de día como de noche. Yo seguía llorando cuando llegaba la hora del biberón.
El primer viernes que mi marido ya trabajaba y había reunión de Lactando decidí acercarme, fuí sola, con mi pequeño en el carricoche, se tiró toda la tarde durmiendo. Recuerdo que estaba lloviendo y que habían bastantes madres, que entre ellas se conocían, charlaban y se apoyaban. Yo soy bastante introvertida, por lo que me sénte en una silla y escuché, cuando ya se esta terminando se acerco Lydia (no se si se acordará, pero yo no me voy a olvidar de esa maravillosa tarde) y no pude decir ni una sola palabra cuando me empezaron a salir lagrimas de los ojos, me escuchó y comprendió. Habló conmigo, y llamó a otra mami Eva (mi hada madrina) Hablamos de relactar, pero que era eso???? Eva era mama de Pablo, con él había relactado y estaba embarazada de Celia. me comentaron que me olvidara de los 15 minutos de las tres horas que yo me empezaba a saltar cuando estaba sola y veía a Josué tranquilo. Eso fue un viernes y quedé para el lunes por la mañana con Eva en una cafetería. MI LACTANCIA EMPEZÓ A CAMBIAR.
Esa misma noche en cuanto llegó de trabajar se lo dije a Fran, en principio no se opuso pero no lo entendía, no entendía porque tenia tanta manía por dar teta, no pasa nada si no se puede, me decía, cuando Josué se durmió mire por internet, no lo pintaban fácil y que se necesitaba mucho apoyo, apoyo que no lo tenia claro.
Cuando quedé con Eva me explicó como hacerlo, y me recalco que necesitaría ayuda, yo estaba convencida y me daba igual lo que el resto pensara.
Mi relactación fue por sonda cada dos horas tenia que dar pecho y preparar biberones para dárselos a la misma vez que tomaba pecho. No voy a engañar fué duro los primeros días hasta que ya cogí la inercia. Mi pareja no se oponía pero tampoco me apoyaba, ahora lo entiendo era su miedo a que no funcionara y pasara hambre, solo miraba por el bien de su hijo, y miento si digo que yo también pasé ese miedo y en lugar de pesarlo todas las semanas, lo pesaba a media semana a ver si iba bien.
Fueron cuatro meses duros de mucha piel con piel, de horas dando teta, de amor compartido, pero muy sanadores, ahora me alegro de haber conocido a todas estas mujeres, madres que ayudan a otras que en un momento dado nos sentimos solas y perdidas.
Tras esos cuatro meses de trabajo Josué y yo disfrutamos largos meses compartiendo momentos, complicidades, amor.
Cuando mi principe tenia 17 meses, quedé embarazada, yo ya me había planteado el tandem y quería realizarlo. Me daba miedo que por querer darle una hermana (porque fue niña) me cargara esa relación que teníamos. Pero en las 40 semana de embarazo solo se quedó sin tomas teta los dos días que estuve en el hospital. Josué no se destetó por estar yo embarazada, aunque si que lo destete yo por las noches debido al trabajo dentro y fuera de casa y la necesitad de dormir y descansar. Pasamos por muchas rachas, por dolores y sensibilidad por mi parte, a eso del 5-6º mes pieso que disminuyó la producción, hasta el punto que creo que incluso llegó a mamar en seco, aunque cuando le preguntaba me decía que si que salía, así que el siguió mamando, amando.
Cuando tenia 26 meses llegó Itziar, la bebe, y como mama tenia dos tetas pues una para Josué y otra para la hermanita y así siguen hasta el día de hoy.
Itziar se ha acostumbrado tanto al tandem que ahora cuando Josué no quiere o ya ha tomado se busca un muñeco para no estar sola tomando teta.
El principio de Itziar fué totalmente diferente, la experiencia y lo que aprendes te hace estar más tranquila, aprendes a escucharte, a escuchar a tus hijo haciéndolo más fácil todo.
Aquí os dejo nuestra historia una historia de amor y teta.
